A días de haber asumido, por segunda ves, la gestión municipal y como un claro ejemplo de cómo será la nueva gestión (recordemos el caso del hospital de la solidaridad), es necesario hacer un análisis, de lo que algunos motivados aduladores consideran un triunfo rotundo.
La pregunta es: ¿puede una gestión que se caracteriza por encementar la ciudad asegurar una correcta reelección?, ¿una abusiva y millonaria publicidad te convierten en un correcto ganador?, pues no siempre, y eso es lo que ha sucedido en nuestro distrito.
La reelección de Carlos Burgos, con tan sólo un 27% de votos, significa el rechazo de un 73% de electores. La mala estrategia de Lourdes de avalar el transfugismo no le favoreció, por el contrario dicha maña, aquí le cobró la factura, pues Susana arrasó con el voto y por una amplia mayoría. Es curioso notar como los votos hacia Flores Nano, tampoco influyen a los de Burgos, es decir muchas personas que marcaron por la pepecista no lo hicieron por su candidato distrital.
San Juan de Lurigancho cuenta con 577 mil 178 votantes, Burgos logró un 27.6% de votos validos que corresponderían a 120, 171 votos.
SI consideramos analizar los votos concedido al reelecto alcalde, pensaríamos que quizás un 10% corresponden al arrastre que confía ciegamente en Lourdes y su candidato local sin analizar otras opciones, si es así tendríamos un 17% pendiente, imaginemos que de allí existe una mitad, de gente que pudo ser motivada con regalitos, ofertas laborales, 30 solcitos por ser personeros, etc., eso significa que sólo 8.5% considera a Burgos como un buen alcalde digno de reelegirse, suponemos que gran parte de ese porcentaje son los empleados, familiares, amigos, empleados del montón de empresas que tiene y simpatizantes; además de serenos, barrenderos, jardineros, ayayeros, y la familia que bota para que su familiar mantenga la chambita.
Más que satisfecho nuestro reelegido burgomaestre, debería hacer una reflexión a la percepción popular, y es que, es sencillo sentir que las cosas no andan por el rumbo correcto. En el común, el malestar se da por las amenazas coactivas contra humildes contribuyentes, la poca transparencia en adjudicación de obras, obras inconclusas y obras presentadas como propias cuando no lo son; además, de la poca simpatía que irradia nuestro alcalde suman una serie de detalles que generan el hartazgo, rechazo e indiferencia de la población.
El señor Burgos debería agradecer su reelección, no a su “simpatía”, sino a la improvisada práctica política de algunos, esa dispersión de votos entre candidatos que nadie conoce y las ganas de figurar de otros. Sobre los resultados seria bueno que considere y reconozca que una sola alianza pudo hacerle quedar en un segundo o tercer lugar.
Permítame decirle señor alcalde que cuatro años, bajo el mismo estilo de gobernar, son un peligro para su propia gestión. San Juan de Lurigancho, no es un distrito tolerante, ni indiferente, ya lo demostraron con su voto, por el contrario ahora se la tendrá mas medida, sería bueno que considere algunos cambios. Si no se le ocurre, permítame tratar de recomendarle algunos:
1. De hecho la primera es la mas difícil, ser transparente en su gestión., “mire la publicidad de la contraloría”. Tampoco ser transparente significa usar ropa blanca o adelgazar de manera extrema. 2. Cambiar de asesores o si no los tiene procure algunos bueno, cuestan pero le evitan problemas, eso sí nunca les dé el poder, sólo escuche. 3. Retire de su entorno a esa larga lista de chupamedias y arrastrados que lo rodean; sabe como identificarlos, son huachafazos, andan con el celular en la oreja, se creen gerentes, tiene cara de tontos pero son tremendos pendejos. 4. Restituir el sistema de participación ciudadana, es un instrumento de desarrollo y recoge la voz popular. 5. Mejore su imagen institucional. 6. Tenga confianza en la capacidad de técnicos y profesionales locales, al menos conocen más nuestra realidad. 7. Invierta en programas y proyectos sociales, el cemento que tanto le gusta, no se come, no cura enfermedades, no educa. 8. N aburra tan tanta publicidad. 9. No piense que los parques y árboles son un proyectazo, nosotros pagamos para que minino tengamos mejores áreas verdes. 10. Es la oportunidad de demostrar que es un funcionario público eficaz, no trate el municipio como su empresa y a nosotros como sus cholitos, no somos tan cojudos. Ustedes debe gestionar los recursos que nosotros le damos para su correcta administración. 11. No mienta; ¿5 millones de metros de sardineles?, recuerde que la Av. Próceres sólo tiene una extensión de 8 km (8 mil metros), de ida y vuelta no llegan a tanto, 5 millones es una línea de Lima a Miami. Tampoco regale politos, llaveros, fósforos, es inútil, es mejor hablar y proponer, 12. Finalmente, no nos mire como sus enemigos, somos vecinos, preocupados igual que usted en nuestro distrito. Nosotros no cobramos, nos gusta hacer lo que hacemos.
Tampoco, señor alcalde recurra al transfugismo, eso le quitó votos a la tía Lourdes, mírelo así; los votos de SJL le quitaron la oportunidad de ser la primera alcaldesa de Lima. Tampoco el dinero compra conciencias, le contaré una anécdota:
Como personero en las pasadas elecciones, en menor numero, sin almuerzo y con nuestros y escasos recursos, desarrollamos una increíble labor orientada a defender el voto, eso se llama conciencia política, sin embargo, su ejercito de personeros, que sólo lo hacían por el sencillito, reconocieron nuestra aptitud, la bronca era entre su gente y los persones de los otros grupos con mayor posibilidad.
Al cerrase los votos, me senté al lado de una personera joven de su bando, chica de barrio, de buenos atributos, que en su aburrimiento se animó a mirarme, sonreírme y preguntarme: ¿acá ya acaba esto?...No, esto tiene para un para de horas - le dije -…pucha que aburrido, me replicó. Desde unos pequeños audífonos conectados a mi celular escuché los resultados a boca de urna. Nuestra, cauta alegría era evidente.
A ésta primera noticia, pude ver como los coordinadores de su partido corrían de un lado a otro, se reunían, llamaban, algunos casi lloraban. En tanto, la chica que estaba a mi lado al mirar mi sonrisa, volvió a preguntarme, mientras su compañera nos lanzaba un mirada despreciativa, fulminante: ¿Qué está pasando?- me dijo-,...Gana Fuerza Social, le respondí - en tono bajo…!así, exclamó con poca sorpresa, mientras me barrio con la mirada y mas tranquila se me acercó al oído para confesarme: “ Yo voté por Susana y en el distrito por Rabanal”.
