Plan de Desarrollo Concertado: La Política (Parte IV)

• La educación es clave, ya que a través de ella se puede lograr alcanzar la excelencia de las personas, mejorar sus conocimientos y capacidades y, con ello, ofrecerles la posibilidad de -en el proceso económico productivo- añadir valor agregado a los bienes y servicios que se producen. La educación es un factor decisivo, asimismo, para fortalecer el capital humano, el capital social, la gobernabilidad y la creación de élites democráticas que se conviertan en una fuerza dirigente de la sociedad y delEstado. El Gobierno Municipal debe contar con políticas que promuevan la excelencia en la sociedad, especialmente entre los niños, adolescentes y jóvenes. La educación en valores, el conocimiento de tecnologías de avanzada, una formación humanista que respete los derechos humanos y una vocación por unir los conocimientos teóricos a la aplicación práctica.
  
• La educación debe incidir en la formación de valores y conocimientos técnicos.
  
• Es deber del Estado y del Gobierno fortalecer a la familia pues en ella se desarrolla la socialización básica y la educación en valores.
  
• En el Perú y en SJL se deben crear élites democráticas: educadas, cultas, integradas al distrito y con capacidad de asumir un compromiso y un liderazgo que fortalezca el tejido social y la asociatividad o la capacidad para el trabajo coordinado y concertado. La formación de élites democráticos o de una inteligencia nacional, inteligencias regionales y locales vinculadas a los ciudadanos es un factor que fortalece la gobernabilidad y la vida social. Es un factor de desarrollo. En SJL se debe promover la creación de una élite democrática, moderna, articulada al distrito con el fin que se convierta en un factor de desarrollo. Ello requiere el fortalecimiento de la sociedad civil.
  
• Se debe convertir en un lema que se practique la antigua enseñanza nacional de no seas ladrón, no seas mentiroso y no seas ocioso. La versión positiva es: se honrado, veraz y trabajador.
  
• En el Perú y en SJL la política debe superar graves defectos que la pervierten, restándole toda posibilidad de beneficio a la comunidad. La corrupción, el burocratismo, nepotismo, el mercantilismo, la mentira, el engaño, el interés personal, familiar, partidario o de grupo por encima del interés de la comunidad, la ineficiencia y la desidia, son todos obstáculos para el buen gobierno.
  
• La corrupción es el obstáculo mayor de la política peruana. La corrupción refuerza la pobreza, deslegitima a los gobiernos y al Estado, provoca escepticismo, envenena la relación entre la llamada clase política y los ciudadanos. Es imperativo un pacto anticorrupción entre todas las organizaciones políticas democrática.
  
• La pobreza es un factor que afecta a la mayoría de peruanos. En SJL más de 400 mil personas son pobres y un número importante que es necesario precisar vive en extrema pobreza. Es urgente el Censo Nacional con el fin de determinar la población y el estado social en el que se encuentran.
  
  La pobreza es el principal obstáculo para el ejercicio de la libertad y, por ende, de la democracia. Se debe derrotar la pobreza para que los ciudadanos alcancen mayor calidad de vida y estén en condiciones de ser protagonistas de su desarrollo individual que incida en el bienestar de sus familias y en el desarrollo local y nacional. Es necesario liderar un Pacto Nacional que una a todos en la lucha contra la pobreza. Es responsabilidad del Estado que los ciudadanos cuenten con las garantías políticas para el ejercicio de su libertad y participen con la plenitud de sus capacidades en la sociedad y en el mercado.
  
• En San Juan de Lurigancho el ejercicio de la política en la ciudad está condicionado por su historia que ha ido formando una determinada cultura política: valores, usos, costumbres, métodos y medios, es decir, una determinada manera o forma de hacer política. Esta ha sido condicionada por un crecimiento explosivo de la población en medio de una informalidad predominante, la ausencia de instituciones, una extrema debilidad del Estado y la presencia de individuos y grupos que han actuado al margen de los intereses sociales y de la legalidad, traficando con las tierras, aprovechando la pobreza para engañar o para invadir los terrenos destinados al equipamiento que beneficie a todos. La informalidad es un factor que refuerza el subdesarrollo.
  
• La cultura política dominante en SJL es similar a la que impera en el Perú. Por un lado hay un crecimiento de las ideas democráticas y de una cultura de cooperación proveniente del pasado histórico y de otro lado,existe una política basada en la confrontación, la violencia verbal, las campañas de desprestigio, la defensa de intereses personales y de grupo. La política es entendida, asimismo, como una actividad conspirativa de unos contra otros. Todo ello heredado de la acción de la izquierda marxista, del terrorismo y de una cultura autoritaria y despótica que se expresa a través de algunos partidos y que subsiste en algunos dirigentes. Los autoritarios -que se camuflan en la democracia utilizando un lenguaje ad hoc- buscan un espacio para destruir al competidor al que consideran su enemigo.
  
• Considerar en democracia al competidor como a un enemigo es una actitud antidemocrática que impide la unidad, fundamental para alcanzar el progreso y es la raíz de una visión de la política como una guerra, engaño, campañas de desprestigio, emboscadas periodísticas, difamación entre otras deformaciones.
  
• En SJL hay medios de comunicación democráticos y transparentes que conviven con otros medios vinculados a grupos de poder local, que practican -en algunos casos- un periodismo poco constructivo que busca el desprestigio de las personas e instituciones. En otros se presiona y se utiliza el chantaje y promueve la violencia. Se pretende la desestabilización y la destrucción de la imagen de los personajes públicos. El periodismo libre, democrático, respetuoso de la libertad de prensa y de la persona humana sin embargo se va abriendo paso.
  

 

 

Dejanos tus comentarios:

 

---

 

Mas articulos de Oswaldo Carpio: